Después de años enganchada al imbécil de Rafa, Ada consigue dejarle y... encontrar a Gonzalo. Parece que la suerte empieza a sonreírle: Rafa era un zángano déspota y egoísta, y Gonzalo, su amor de juventud, todo lo contrario: amable, comprensivo y lleno de amor. Es el hombre perfecto para Ada.
El problema es que Ada... Bueno, Ada lleva tanto tiempo hablando en la primera persona del plural que se ha olvidado de que, ante todo, existe en singular. La ruptura con Rafa fue la primera chispa de una particular historia de amor, la de Ada consigo misma. Pero ¿qué pasa con Gonzalo? ¿Se puede decir nosotros en singular? ¿Es posible ser tú y empezar a ser yo mientras somos nosotros?
De la mano de sus alocadas pero fieles amigas, de su familia y, sobre todo, de Gonzalo, Ada intentará afrontar sus fracasos y superar sus miedos. Y descubrirá que, en la vida, se puede ser muchas cosas y que hay gente maravillosa dispuesta a acompañarte. Con un lenguaje fresco y lleno de humor, Paula Miñana nos regala una historia llena de situaciones hilarantes y personajes entrañables que, a pesar de sus defectos —o precisamente por ellos—, consiguen hacerse un hueco en nuestro corazón. Una novela tierna y divertida sobre el amor, la amistad y la vida en general.